Blanca Luque
Las mujeres han estado en el mundo tecnológico desde los comienzos de la programación, incluso cuando no existían los ordenadores, allá cuando se cocían los primeros algoritmos y teorías computacionales. Es curioso pensar que antes había más mujeres que programaban que ahora. Diferentes factores como la introducción del ordenador personal, la conformación del “estereotipo de programador”, la consideración de los estudios de informática como ingeniería o el peso que ha adquirido exponencialmente con los años, conforman ese techo de cristal que ha ido reduciendo el espacio en este sector para las mujeres.
Sin embargo, siempre hemos estado ahí… Sigue leyendo